A MI PERRO
Observen bien al cuadrúpedo con traje de lunares que arriba he posteado. Te parece bonito, seguro. Lógico, no tienes que vivir con él ni aguantarlo todo el puto día. En serio, es un suplicio, se pasa todo el día quejandose por todo, si si, has oído bien, quejándose. A su manera claro, que es gruñendo.
Empezamos por la mañana sobre las 8:00, mi madre (que más abajo también pillará) desayuna y el perro con el morro dándole golpes y gruñendo para que mi señora madre le vaya cediendo parte de su ración matutina de galletas. Seguimos, son las 10:00 de la mañana y el perrito ya tiene ganas de salir, pues ahora comienza de nuevo otra ración de gruñidos, pero multiplicados por 1000 como si lo estuvieran flagelando o algo parecido. Un espectáculo atroz y más si estás durmiendo. Ahora comienza lo que yo llamo "entretiempo", que no es más que el tiempo que transcurre entre la hora de salida matutina y la hora de la comida. En este transcurso de tiempo de unas 4 horas más o menos, no sólo gruñe si no que además te persigue todo el tiempo cruzándose en tu camino, haciendo muchas veces que tropieces con él. La hora de la comida y las posteriores hasta la hora de acostarse las omitiré porque son más de lo mismo, pero por la noche llega la mejor parte. Lo siguiente que os contaré es totalmente verídico y hay personas que lo pueden corroborar. Y a mi madre por cierto, la tendrían que empalar porque ¿quien creéis que es la culpable?
Llega la noche y estamos en invierno, y como hace frío mi madre tuvo la brillante idea cuando el perro era pequeño, de taparlo con una manta. Al principio bien, puesto que era pequeñito y no se movía, pero con el paso de los años el perro creció y las mantas se le fueron quedando más pequeñas que antes, por lo tanto enseguida que se movía se destapaba. Hasta aquí todo "normal" ¿verdad? Lo gracioso viene ahora, como el perro estaba acostumbrado a estar tapado, cuando se destapaba comenzaba a llorar, y como mi madre toma somníferos no se da cuenta. Adivinad a quien le tocaba levantarse todas las noches maldita sea, y no una ni dos veces.
Pues este es el tragín nocturno que tenía con mi adorable mascota, a diario. Gracias al cielo y después de 11 años este es el primer invierno que he conseguido quitarle esta manía, por lo menos ésta.
A MI MADRE
A éste tenía yo ganas de llegar. A vuestras mentes estará llegando ahora mismo un sentimiento ajeno de frivolidad y odio hacia mí, entremezclados. Otros me diréis que con la edad que tengo, lo que tendría que hacer es emanciparme. Y otros simplemente me comprenderán.
¿Cuál es el fundamento principal para que yo quiera que mi madre desapareciera? Muy sencillo: LA HERENCIA... es broma sólo quedan deudas y aunque no las hubiera, tampoco sería la razón.
Todo ésto va mas allá, MI MADRE ME PERSIGUE POR TODA LA CASA. Como suena. Por si no he apagado la luz, por si se me cae una gota al suelo cuando meo, por si me siento en el lado del sofá en el que ella piensa que es más blando, por si la sartén que cojo no es adecuada para lo que la uso. por si no he mullido los cojines, por si TODO!!!!! Y esto es así, estoy sometido a un estrés diario en mi propia casa, incluso más que en cualquier trabajo. Os diré también, que soy una persona ordenada por lo tanto no tendría que haber una razón aparente, pero sin duda la hay. Es una maniática de la limpieza, limpia cosas que ni yo sabía que se pueden limpiar y encuentra manchas "invisibles". Todo un espectáculo. Los cristales de mi casa ya no existen porque de tanto limpiarlos se ha comido el grosor. La cocina tiembla cuando la ve aparecer con
los productos de la limpieza. Y hablando de productos, tiene un armario lleno de éstos en el que conté un día más de cincuenta, eso sin contar suavizantes y productos de lavar la ropa. Un paraíso para los amantes de la pulcritud.
También tiene cosas buenas, pero como aquí se trata de reírnos dando por culo, no las pondré. Pero tranquilos ya haré un post sobre mí, resaltando toda mi mierda que no es poca, como me han pedido por ahí.
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